Andalucía dispone de maravillosos parajes naturales dignos de admirar como el Parque Nacional de Doñana, el Desierto de Tabernas, Sierra Nevada, la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, entre otros. Parajes naturales que son símbolo de nuestra comunidad autónoma, sin embargo, en este artículo vamos a destacar el olivar andaluz como pulmón verde de Andalucía.
El olivar andaluz, pulmón verde del planeta
El olivar andaluz se extiende por las provincias de Jaén, Granada, Córdoba, Málaga y Sevilla con una extensión de alrededor de 1.500.000 hectáreas. Representa aproximadamente el 30% de la superficie cultivada de Andalucía. A nivel nacional, en Andalucía se encuentra el 60% del olivar español. Un dato contrastado por cada visitante de Andalucía nada más cruzar el Parque Natural de Despeñaperros que da paso a la gran extensión de olivar de la provincia de Jaén.
Dentro de una de las grandes amenazas para la vida humana como es el cambio climático, el olivar andaluz es un claro ejemplo de un sector que trabaja para luchar por un futuro más verde. El bosque de olivar andaluz ayuda a retirar una enorme cantidad de gases de efecto invernadero.
Concretamente desde el Consejo Oleícola Internacional se desveló que para la producción de un litro de aceite de oliva, se generan aproximadamente 1,5 kilos de CO2. Pero por otro lado, el olivar es capaz de absorber hasta 11,5 kilos de CO2 por cada kilo de aceite de oliva producido. Esto genera un espectacular balance positivo de aproximadamente 10 kilos absorbidos de gases nocivos para nuestro planeta.
El olivar andaluz destaca por ser uno de los ecosistemas más ricos de la Península Ibérica, protagonizado por el árbol del olivo. Mediante el proyecto LIFE Olivares vivos, se ha analizado la biodiversidad de algunos olivares de la zona, con resultados muy positivos con numerosas especies de aves, hormigas, insectos polinizadores, entre otros.
El olivar, paraje natural de la provincia de Jaén
Principalmente dentro de la extensión del mar de olivos andaluz, destaca el olivar de la provincia de Jaén. Un auténtico bosque humanizado compuesto por más de 65 millones de olivos que abarcan medio millón de hectáreas. Lo que convierte a la provincia en el mayor productor a nivel mundial de aceite de oliva del mundo.
La variedad de olivar predominante dentro de la provincia de Jaén es la Picual principalmente. Pero además podemos encontrarnos diversa variedad como la variedad Royal, Hojiblanca y Arberquina.
Simplemente hay que hacer una ruta por la Autovía A-316 que une las ciudades de Úbeda y Alcaudete denominada “Autovía del Olivar”, para poder apreciar el inmenso manto verde que forma el olivar dentro de la provincia de Jaén.
Destacamos principalmente la perspectiva de la comarca de La Loma, vista desde el Puente del Obispo, donde podemos ver la ladera verde oliva que llega hasta las ciudades renacentistas “Patrimonio de la Humanidad” de Úbeda y Baeza.
Desde los miradores de la ciudad de Úbeda podemos deleitarnos de las impresionantes vistas que justifican el popular refrán de “Por los Cerros de Úbeda”, una inmensa ladera de olivar que llega hasta el sistema montañosa de Sierra Mágina.
El olivar andaluz como forma de vida
Además de ser fuente de biodiversidad, el olivar andaluz es una forma de vida. En casi todas las familias jienneses hay alguien que vive del olivar o con alguna actividad que se relacione con ello. Por ello el olivar destaca como fuente de riqueza de la provincia de Jaén.
Sin embargo, este inmenso paraje natural se encuentra actualmente en peligro de extinción debido a la crisis de precio del aceite de oliva que vive actualmente el sector. Los bajos precios del aceite de oliva están haciendo que los agricultores del olivar vean insostenible la recogida de este preciado fruto. Viéndose en casos extremos obligados al abandono del olivar.
Debido a ello, se deben tomar medidas urgentes para salvar al olivar uno de los parajes naturales más importantes a nivel nacional. Con medidas a corto plazo conjuntas desde el Gobierno, los agricultores e intermediarios que permitan que la producción vuelva a ser rentable, primando la calidad-precio del aceite de oliva y de esta manera poder conservar este hermoso bosque de olivos que cubre las provincias de Jaén, Granada, Córdoba y Sevilla.